El Mayor Mandamiento De Dios

by Rev. Jeff  |  11/03/2024  |  Del Clero

Al acercarnos rápidamente al final del Tiempo Ordinario, la Iglesia nos resume su mayor enseñanza, el mayor mandamiento: “Amar al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas”. Cuando amamos, buscamos permanecer unidos y permanecer con el amado, y nunca ofender ni separarnos. Cuando amamos a Dios, entonces confiamos y amamos todas las cosas de Dios. Se nos enseña el amor del Padre que no quiere que nadie muera, sino que escuchemos y creamos en Su Hijo y lo sigamos hasta la Resurrección; para que podamos tener vida eterna.

En el bautismo, estamos llamados a amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Dios nos amó, para que nuestras vidas se salven a través de Su Hijo. Y por eso, estamos llamados a hacer lo mismo: ayudar a otros a tener vida, vida en abundancia. Donde hay necesidad humana, nosotros, la Iglesia, tenemos un “trato preferencial” para los pobres, como las viudas, los huérfanos, los inmigrantes, los enfermos, los ancianos y los encarcelados. Individualmente y como nación estamos llamados a ayudar a aliviar el sufrimiento donde sea que esté, ya sea en nuestro país o en el extranjero.

Esta semana, en las urnas, tenemos una oportunidad única de salvaguardar el “bien común”, la dignidad de cada persona humana, en todas sus condiciones. Al mismo tiempo, podemos hacer esto, mientras detenemos la destrucción de vidas por los estragos de la guerra que amenaza la paz mundial. El más importante de todos los temas de la vida es el derecho a la vida de los no nacidos. Sin vida en el útero, donde comienza la vida (el tema preeminente de nuestros días), la defensa de todos los demás derechos humanos pierde su significado. Ser verdaderamente servidores desinteresados de Dios es amar a nuestro prójimo como Dios quiere que lo hagamos. Esto es lo que hace la paz en el mundo y en nuestros corazones.

-Rev. Jeff